Esfuerzos no tan vacíos

Dicen que no debes dar sólo para recibir, pero dar demasiado y recibir tan poco te hace sentir poco valorado, como que nada de lo que haces y todo el esfuerzo que pones, no es suficiente, y que tal vez nunca lo será.

Ayer fue uno de esos días donde me sentí así, me sentí burlada por la vida quizás, o por la cruda y áspera realidad, por las promesas vacías y los "para siempre" de las personas, o tal vez por circunstancias que desconozco.
Sea como sea, se me juntó todo. Me sentí desmotivada, rechazada y desvalorada, y es ahí donde comienzo a cuestionar por qué hago lo que hago, por qué me esfuerzo tanto si tan poca gente valora eso y otros se fijan más en aspectos superficiales. Ahora me doy cuenta que lo hago porque ME GUSTA. Me gusta la forma en que me siento al dedicarle mi tiempo a estas cosas, aún cuando sepa que ni siquiera la persona por la que más espero lo notará. ¿Que por qué me gusta? No lo sé. Soy demasiado complicada y la verdad, a veces ni yo misma me entiendo. Pero así soy, y no he podido cambiar y tampoco sé si quiero hacerlo.
Este es el punto donde, pensando en frío, digo que soy demasiado masoquista, y seguro quien me lea también lo pensará. Pero mi corazón es terco  y apasionado al extremo, y no se deja dominar por la razón. Así lo golpeen, cuando llegan esos momentos, él es quien me dice qué hacer. Por eso es que me digo a mi misma: "mi misma, o intentas dominar a tu corazón y controlarte, o te aguantas esos momentos sentimentales donde quieres mandar al mundo al carajo.". Hasta ahora, me toca aguantarme, pero siempre intentando un poco más no darle tanta importancia a personas que no reflejan lo mismo hacia mi, e intentar hacer las cosas para y por mi, para mi satisfacción personal, en lugar de por los demás. Y mientras tanto, seguir, no detenerme, porque la vida continúa y no quiero perdérmela.

Namaste and Good luck.

Recuerdos

Empezaré diciendo que ni me gusta lo que voy a publicar, pero igual lo voy a hacer...
Tengo mucho tiempo sin escribir nada, ni siquiera ninguno de mis poemas locos que nadie más que yo ha leído. ¿Por qué? Bueno, creo que mi inspiración anda ocupada con algo/alguien más y no ha querido servirme para escribir nada.

Llevo meses ya queriendo escribir algo sobre este tema de los recuerdos pero nada me salía bien... Duré un tiempo escribiendo lo que voy a poner a continuación y no está muy bueno, pero ahí va...

Tener algo y después perderlo es algo que pasa más frecuentemente de lo que pensamos, por eso de “nada es para siempre”. A veces sabemos que lo vamos a perder tarde o temprano y nos hacemos esa idea, a veces sabemos exactamente la fecha de expiración, a veces ni siquiera imaginamos que podríamos perder eso que tanto queremos y muchas veces no valoramos. Cuando pasa, siempre perdemos el tiempo buscándole explicación, nos preguntamos por qué y muchas veces no tenemos respuesta. Este no es mi caso. Aunque me pregunto por qué, mi mayor problema es diferente y quizá un poco peor que ese, mi problema es empeñarme en recuperarlo, cueste lo que cueste, aunque me golpee mil veces y la gente me diga que lo deje pasar ya. Mi problema es querer retroceder el tiempo a una época que permanece en mi mente como si hubiera sido ayer, es no querer pasar la página porque las que vienen son oscuras y completamente infelices comparadas con las que ya pasaron. Es como que si quisiera pretender que nada cambió cuando la verdad es que todo es completamente diferente. Es ser la persona más terca del mundo diciéndole a la realidad que no me importa lo que ella diga, sólo me importa este imparable deseo de querer volver atrás y quedarme allí.
¿Por qué me pasa esto? Bueno, tal vez porque cuando me siento realmente feliz con algo, me apasiono mucho, me aferro a los sentimientos, aparto todo lo demás para concentrarme en eso y cuando se acaba siento que ya no tengo nada, porque descuidé todo lo demás.
Los recuerdos también toman su parte en esto y cuando la nostalgia se apodera de uno, es imposible no querer regresar el tiempo a uno mejor. Yo que soy extremadamente soñadora me la paso creando mundos de fantasía donde todo pasa a la manera en que yo quiero y donde la realidad no existe…
A la final creo que el proceso de aceptación comienza realmente cuando duele más intentar en vano recuperar algo que hace tiempo se perdió, que el mismo hecho de haberlo perdido. Cuando ya te cansas de intentar sin ningún resultado. Espero que eso ocurra pronto para mi, mientras tanto sigo en mi rutina diaria intentando distraerme con las banalidades del mundo…
Namaste and good luck.